Una de las herramientas fundamentales para las organizaciones con las que colaboramos es la posibilidad de que sus equipos de RRHH, PRL o médicos contacten con nosotros para trazar planes de acción conjuntos. Gracias a ellos, podemos acompañar a sus trabajadores de una forma global y también en aquellas situaciones específicas que, por su complejidad, pueden ser difíciles de abordar. ¿Quieres saber cómo lo hacemos? Te contamos uno de nuestros casos reales:

Durante las Navidades, recibimos la llamada del dpto. de RRHH de una de nuestras Human Companies. Nos contaron que un miembro de su equipo estaba afrontando una situación personal traumática y no sabían cómo dirigirse a él, qué decirle ni cómo apoyarle.

Creamos un grupo de trabajo con los miembros de la organización que colaboraban directamente con él, donde pudieron contarnos cómo se sentían y nos explicaron de manera pormenorizada la situación. En esta evaluación inicial, nuestro equipo de psicólogos facilitó unas primeras pautas de manejo de la comunicación: qué decir y, sobre todo, qué no. Además, repasamos juntos las herramientas de las que disponía el colaborador y a las cuales le podrían redirigir, entre ellas, nuestro PAE.

Paralelamente, preparamos un documento con directrices de comunicación en situaciones difíciles para el equipo de responsables, de modo que pudieran sentirse seguros al abordar la situación.

Pasada una semana, establecimos una nueva sesión para comprobar si lo trabajado anteriormente había funcionado, alinear objetivos y adaptar nuestra hoja de ruta. Como el colaborador aún no se había reincorporado, nos centramos en la gestión del acompañamiento a distancia.

Asimismo, ayudamos a los asistentes a reducir la ansiedad asociada a este acompañamiento: tender puentes es mucho más importante de lo que muchas personas creen, pero también más difícil emocionalmente de lo que parece.

Efectuamos una última sesión para preparar la reincorporación del colaborador y, a su vez, ayudar al equipo para esta acogida: todos los actores son importantes y tienen un rol principal. Además, establecimos pautas de adaptación de tareas ajustadas a las posibilidades reales de este miembro de la organización, así como directrices para detectar si algo ‘no iba bien’.

El trabajo con este equipo fue maravilloso, ya que siempre es un lujo trabajar junto a las personas que se preocupan por el bienestar de su ‘team’. Pero este no es el final… ya que este colaborador se puso en contacto con nosotros para abordar la difícil situación que atravesaba y pudimos ayudarle de manera personalizada.

¿Tú también necesitas apoyo para tu equipo de RRHH?